No se tienen muchas oportunidades a lo largo de la temporada de enfrentarse al reto de Filípides (42 kilómetros) y por ello cada vez son más los que se animan a hacerlo cruzando nuestras fronteras para conseguirlo en una de las grandes. Con esa premisa afrontaba el atleta antequerano del GEDYSA Carlos Sierras el pasado domingo la Maratón de Praga; unas ligeras molestias los días previos en uno de sus gemelos se convirtieron a partir del ecuador de la prueba en fuertes dolores, agravados en los numerosos tramos adoquinados que jalonaban el recorrido y que hicieron que el antequerano tuviese que disminuir inevitablemente su cadencia de zancada. Ni el mágico escenario de la bella ciudad checa de las cien torres, ocultó la realidad de la dureza de la maratón y Sierras, se fue a 3 horas 45 minutos 26 segundos cumpliendo su reto de acabar una nueva maratón pero lejos de sus mejores registros sub 2 horas 50 minutos que estableciera en la anterior temporada.